¿Qué es passivhaus?
Consumir poco, ser eficiente, es un compromiso con la arquitectura y con el medioambiente.

Para conseguir estos índices tan bajos, Passivhaus establece cinco puntos importantes, aunque nosotros os los vamos a resumir en dos:
1 · ENVOLVENTE TÉRMICA · es la piel de la casa, que separa el espacio habitable del exterior en todas sus caras (suelo, techo y paredes).
Las casas pasivas, deben tener una piel altamente eficiente. Para ello el aislante térmico y las ventanas serán de altas prestaciones.
2 · HERMETICIDAD · las casas tienen que ser herméticas, o más bien poder controlar cómo se escapa el aire de ellas.
En la vida diaria generamos vapor de agua, CO2 y otras sustancias que hacen que el aire que respiramos esté viciado. Pensareis: ¿si la casa es hermética cómo elimino este aire viciado? Para ello se emplea un recuperador de calor, que no es más que una máquina que ventila continuadamente nuestras estancias. Este recuperador de calor lo que hace es intercambiar el calor del aire calefactado de las casas con el aire que introduce del exterior. Olvídate de abrir las ventanas para ventilar, porque no será necesario, a no ser que quieras disfrutar del olor del mar, por ejemplo.
De esta forma controlamos también de la temperatura, la humedad y el CO2 interior, obteniendo además de una alta eficiencia un aire muy salubre.
¿Sabías que en una habitación con la puerta cerrada en una noche se llegan a 2000 partes por millón de CO2 y que a partir de 400 ppm se descansa peor?
El estándar Passivhaus se puede utilizar en cualquier tipo de edificio, incluso en partes de los mismos. Obviamente cuando se aplica el estándar a obras de rehabilitación o reforma, a veces, no puedes conseguir todas las mejoras que se conseguirían en un edificio nuevo, pero se pueden rebajar los consumos y mejorar las condiciones ambientales enormemente.
Todo esto siempre, como buen gallego, depende…
Los datos oficiales de PASSIVHAUS especifican que el aumento de construcción sobre una construcción tradicional es de un 5 a un 10%, y que esa inversión se amortiza en unos 7 años.
Sin embargo en nuestra experiencia no estamos encontrando estos incrementos ya que en climas templados como el gallego es fácil mantener una buena temperatura todo el año sin incrementar demasiado la eficiencia de la envolvente. El ahorro que obtenemos de no poner sistema de calefacción equilibra ampliamente el coste de convertir una vivienda convencional en una pasiva.
¿Te imaginas pagar el mínimo de electricidad toda tu vida?
La amortización es inmediata.
Seguro que has escuchado este slogan más de una vez.
El moho aparece cuando una superficie está a 12,6º y el ambiente tiene más de un 70% de humedad. En una Passivhaus la temperatura de las paredes nunca baja de 18º y la humedad está controlada por el recuperador de calor, por tanto…Olvídate del moho y las humedades.